sábado, 6 de junio de 2015

Saber lo que puedes controlar y lo que no

La felicidad y la libertad     

                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                comienzan con la clara comprensión de un principio:
 algunas cosas están bajo  nuestro control y otras no. Sólo tras haber hecho frente a esta regla fundamental y haber aprendido a distinguir entre lo que podemos controlar y lo que no, serán
posibles la tranquilidad interior y la eficacia exterior.
Bajo control están las opiniones, las aspiraciones,
los deseos y las cosas que nos repelen. Estas áreas
constituyen con bastante exactitud nuestra preocupación,
porque están directamente sujetas a nuestra influencia.
Siempre tenemos la posibilidad de elegir los contenidos
y el carácter de nuestra vida interior.
Fuera de control, sin embargo, hay cosas como el tipo
de cuerpo que tenemos, el haber nacido en la riqueza
o el tener que hacernos ricos, la forma en que nos ven
los demás y nuestra posición en la sociedad. Debemos
recordar que estas cosas son externas y por ende no
constituyen nuestra preocupación. Intentar controlar o
cambiar lo que no podemos tiene como único resultado
el tormento.
Recordemos: las cosas sobre las que tenemos poder
están naturalmente a nuestra disposición, libres de toda
restricción o impedimento; pero las cosas que nuestro
poder no alcanza son debilidades, dependencias, o
vienen determinadas por el capricho y las acciones de
los demás.
Recordemos, también, que si pensamos que podemos
llevar las riendas de cosas que por naturaleza escapan
a nuestro control, o si intentamos adoptar los asuntos
de otros como propios, nuestros esfuerzos se verán
desbaratados y nos convertiremos en personas

frustradas, ansiosas y criticonas

jueves, 22 de enero de 2015

Mario Alonso Puig - La Segunda Oportunidad (1de2)

Reinventarse: tu segunda oportunidad;

Reinventarse: tu segunda oportunidad; del Dr. Mario Alonso Puig

"Hay personas que reaccionan inmediatamente con ira ante la más mínima provocación. Hay seres humanos que experimentan profundos sentimientos de culpa sencillamente cada vez que ocurre algo doloroso, aunque ellos no tengan nada que ver. Es importante saber que muchas de estas emociones no son nada más que patrones automáticos de respuesta, puros automatismos que hemos reforzado una y otra vez a lo largo de los años. Ahora quiero que el lector se imagine a las células de un cuerpo humano continuamente sometidas a ese aluvión de hormonas relacionadas con la ira o la culpa. La membrana va a necesitar desarrollar un mayor número de receptores, de puertas de entrada, ante la llegada de tantas moléculas. Es como si la propia célula se acomodara a este entorno químico y de esa manera se convirtiera en una célula con sentimientos de ira o de culpa. No cabe duda de que esto podría tener una repercusión en la manera en la que va a funcionar esta célula, en los genes que se van a expresar y en los que no."
SINOPSIS 
El Dr. Mario Alonso Puig nos ofrece un mapa con el que conocernos mejor a nosotros mismos. Poco a poco irá desvelando el secreto de cómo las personas creamos los ojos a través de los cuales observamos y percibimos el mundo. Son estos ojos los que tantas veces hacen que nos enfoquemos en las culpas del pasado y no en las posibilidades del futuro. El futuro que este libro nos permitirá afrontar con una nueva mirada.
Temo que la palabra autoayuda, que no me queda otra que escribir, os espantará a algunos de vosotros (como tal vez haría conmigo). Siendo estrictos, esto no es del todo un libro de autoayuda. Y diréis: "¿por qué? ¿porque aparece la palabra Dr. delante del nombre del autor?" El que sea un médico el que lo escribe no asegura que  vaya a ser algo científico. Y, pese a que está apoyado en la ciencia y ello se evidencia en varias ocasiones, a mí me ha dejado un sabor a autoayuda más que a ciencia.

A decir verdad, no es este un libro que pueda adjetivar como imprescindible. Tampoco me ha dejado huella. Si bien es cierto que lo que cuenta puede resultar interesante, que se lee fácilmente y que en ningún momento me ha resultado tedioso. Si lo he leído ha sido porque una persona me lo prestó, de forma desinteresada y con toda la ilusión. Ilusión que yo compartí pues me sorprendió que, pese a la poca relación que me unía a ella, tuviera a bien confiármelo. 

Durante toda la lectura también experimenté la continua sensación de haber leído aquello en alguna parte. Hubo algún fragmento que me recordó a El cerebro social, un libro de divulgación científica reseñado en el blog, muy recomendable por cierto para los curiosos del cerebro humano.

Creo que, pese a que me haya dado poca cuenta, de forma subrepticia Reinventarse me ha aportado algo, aunque fuese en el periodo de tiempo que estaba leyéndolo. A veces tengo una vida algo estresante (o yo misma me estreso) y tuve la sensación de que me ayudaba a mantener la calma y tomarme las cosas con más tranquilidad. 

Pero no todo trata de combatir el estrés. También nos habla, por ejemplo, desaber comprender y respetar a los demás, controlándonos en las situaciones en que sentimos unas ganas irrefrenables de "atacar" al prójimo. Es una parte que me gustó especialmente, aunque a veces se enfoca de una forma visiblemente religiosa, pero son ideas que se pueden extrapolar a cualquier ámbito. 

Con solo 177 páginas, está dividido en capítulos cortos, cada uno de los cuales se centra en una temática. En ellos el autor parece hablarnos de tú a tú y nos transmite las ideas de una manera clara y fácil de leer. Entre párrafo y párrafo se intercalan recuadros que destacan las sentencias más importantes del texto, así como un resumen de una frase al final de cada capítulo. Además, una de las cosas más entretenidas son las anécdotas o cuentos populares que de vez en cuando emplea el autor para ejemplificar sus testimonios.

Desde luego, no me atrevería a recomendarlo a alguien a quien la palabra "autoayuda" le cause alergia. No obstante me consta que es un libro que, en menor o mayor medida, ha contribuido a ayudar a algunas personas a salir adelante. Y, pese a que para mí no ha supuesto una gran lectura, si ha llegado a mis manos ha sido gracias al boca a boca, que ya es algo meritorio.

Reinventarse en "Para todos la 2" de TV2